Valencia CF31 octubre 2023

Vicente Navarro Aparicio, el emblema que representa el Sentiment Etern del Valencia CF

El Club recuerda, en el Día de Todos los Santos, la figura de los valencianistas que nos dejaron a lo largo de más de un siglo de historia

Una emotiva estatua de bronce en un asiento de la Tribuna del Camp de Mestalla es el homenaje del Valencia CF a todos los que han traído al Club hasta aquí.

Desde 2019, año del centenario del Club, el Camp de Mestalla alberga una escultura cargada de emotividad, única en el fútbol de élite, que simboliza el homenaje del Valencia CF a todos los valencianistas que nos han traído hasta aquí gracias a su amor por el Club. Ser del Valencia CF es un Sentiment Etern que se lleva en el corazón, que se alimenta y crece de generación en generación, superando cualquier dificultad, con una misma voluntad de querer llegar.

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En memoria de todos los que han traído al Valencia CF a cumplir sus 104 años de vida y que ya no están, se puede ver una escultura colocada en el asiento 164 de la fila 15 en la Tribuna Central con la que se les rinde homenaje a todos ellos, siempre presentes en los partidos del también centenario Camp de Mestalla. El Valencia CF es un Sentiment Etern.

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“Juntos vivíamos cada partido la experiencia de sentir Mestalla y a nuestro equipo”

Una emocionante historia se esconde tras este homenaje universal a todos los que han compartido durante más de un siglo el sentimiento valencianista. A esa butaca de tribuna acudía partido tras partido Vicente Navarro Aparicio, socio número 18 en el momento de fallecer. Sufría y sentía acompañando al Valencia CF lejos de Mestalla, como en la final de la Copa de 1967 que se ganó al Athletic Club, pero a sus 54 años perdió la visión por un desprendimiento en la retina. Dejó de ver… pero no de sentir.

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El Valencia CF seguía, incluso más fuerte, en su corazón. Vicente no dejó de acudir a Mestalla junto a su hijo. Vivía los partidos, sentía el Valencia CF, disfrutaba con un ambiente único mientras su hijo le narraba las jugadas, siendo la temporada del Doblete de 2004 el año más feliz de su vida, compartiendo la emoción pura de miles y miles de corazones como el suyo.

“Su recuerdo y el de todos los que nos hicieron del Valencia CF están con nosotros”

A día de hoy, no está físicamente entre nosotros, como tantos otros valencianistas que nos han dejado en esta historia de más de 100 años del Valencia CF. Pero no se lo va a perder. Su figura supone un símbolo que representa, para la eternidad, a todos los que han sentido, sienten y sentirán por siempre la emoción de ser del Valencia CF.

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